Hola, hoy voy a subir un cuento que escribí hace poco, lo voy a subir porque seguro que se me va a perder :) como otros que ya se perdieron. Ojala les guste y les debo las noticias de la película linterna verde y flash, lo que pasa es que aun no deciden quienes serán los actores, solo hay especulaciones, cuando se defina bien eso vamos a hablar.
ARLES Y LOS MONTES OSCUROS
Hace mucho tiempo, en tierras muy lejanas había un reino llamado Asturias, el cual era gobernado por una reina y sus tres hijos, porque el rey había muerto en una batalla, defendiendo el castillo y a su gente, los tres príncipes eran los que tomaban la mayoría de las decisiciones, algunas acertadas, otras no tanto, pero cada una era a son del pueblo y por eso la gente estaba feliz y agradecida.
Un terrible día, al menor de los hermano, el príncipe Edgard, fue mordido por una extraña criatura llamada vejeserpiente en una de sus exploraciones e investigaciones por tierras aun desconocidas, cuando el medico del reino lo reviso, Edgard ya estaba en un estado avanzado, ya que la mordida de una vejeserpiente acelera el envejecimiento y él, un joven de 20 años parecía como alguien de 50, y si seguía pasando el tiempo llegaría a tener la edad donde su cuerpo no podrá resistir más y trágicamente moriría, el doctor dijo que la única cura posible seria poción de hierba panaceimica, una hierba que crece una vez al año en los montes oscuros, cuenta la leyenda que cuando se descubrió esta hierba, se llego a pensar que era la cura para todas las enfermedades y por eso se debe su nombre, hubieron muchas batallas por obtenerla, muchos reinos se destruyeron por esta hierba, hasta que paso el tiempo y fue olvidada, yo, en mis estudios, puedo asegurar que esta hierba panaceimica es real, y se encuentra en esos montes, incluso aun hay gente que la busca con intereses personales.
Ya estaba decidido, se iría en busca de la hierba, se mandaron a los mejores hombres, pero pasaba el tiempo y no volvían, ni tampoco daban señales de vida, angustiada la reina por su hijo menor, no quería comer nada y por esto, también cayo enferma, el pueblo enterado de lo que pasaba estaba triste y mucha gente cayo en un estado de depresión, así que los dos príncipes restantes tomaron una determinación, como el mayor de los hermanos era el mas apto para gobernar y el segundo, Arles, era el mejor caballero de la armada, como una vez lo fue su padre, él traería la hierba, prometiéndoselo a su hermano Joseph, el cual quedaría a cargo de todo el reino.
Se preparo todo, lo acompañarían 6 hombres, entre ellos Ruroni, su mejor amigo y compañero de innumerables batallas, Arles se despidió de su madre, luego avanzo con paso firme donde lo esperaban sus hombres y antes de partir, en los gigantescos portones del reino, Joseph le dice a su hermano que cumpla su promesa, Arles asintió, sonrío y partió con sus seis caballeros.
Después de tres días de viaje, entraron al llamado bosque de los bandidos, porque aquí esta lleno de bandas de criminales que se esconden de la ley, decidieron pasar a todo galope, pero fueron emboscados por casi 40 villanos, ellos pedían los caballos y todo lo que cargaban, pero el príncipe se negó, los bandidos sacaron sur armas y Arles en un gesto heroico saco su espada y se abalanzó en contra de ellos gritando "están conmigo" a lo que los seis caballeros que lo acompañaban gritaron, hasta la muerte. El combate fue extenso y feroz, y aunque los superaban en numero salieron airosos, algunos estaban con heridas, pero sobrevivirían, y aunque, estaban cansados, el príncipe decidió volver a galopar con la mayor rapidez y así, salir lo mas rápido de hay, pero cuando estaban apunto de lograrlo, fueron emboscados nuevamente por casi 30 hombres, pidiendo lo mismo que los anteriores, otra vez el príncipe se negó, a pesar de las condiciones en que se encontraban, el líder de los bandidos río haciendo relucir sus amarillos dientes y dijo burlescamente ¿acaso quieres pelear con 6 hombres? y además algunos están heridos, a lo que el príncipe respondió, si vencimos a casi 40 de ustedes, podremos otra vez, el bandido impactado con las palabras de Arles, mando a un ave a verificar si era verdad, en eso, Arles le dice, yo príncipe de Asturias , te doy mi palabra que es cierto, así que déjanos pasar, o pelearemos hasta la muerte, en eso volvió el ave posándose en el hombro del bandido, y como si ella hablara se le acerco a su oído, luego, este largo a reír, y grito, es verdad, se acerco a Arles y le dijo, as eliminado a mis enemigos, estoy en deuda contigo, puedes pasar, el príncipe agradeció y emprendió el galope hasta salir de ese bosque.
Cuando ya estaban alejados del peligro, pararon para acampar y recuperar fuerzas del extenso día , cuando llego la noche y disfrutaban de una buena comida y alardeaban de su suerte, desde los arbustos, apareció una horrible criatura, los seis hombres sacaron sus espadas, pero el príncipe al ver que la criatura tenia mas miedo que ellos mismos, les ordeno guardar las armas, y en ese preciso momento, aparecieron 5 hombres, y uno de ellos dijo, disculpen si esta cosa les causo problemas, se nos acaba de arrancar, nosotros somos cazadores, y esto es un mogro, pagan bien por ellos, sobre todo por la hembra, porque es mas dócil, las usan como esclavas, si me permiten, me la llevare enseguida, pero el príncipe nunca avalaría la esclavitud de cualquier raza y le dijo al vocero de los cazadores que le daba 10 monedas de oro por ella, a lo q el cazador respondió que valía mucho mas, unas 100 monedas de oro y sus cuatro acompañantes rieron, pero el príncipe, saco un saco con 100 monedas de oro y la tiro a los pies de los cazadores, ellos la recogieron, pero aun así, sacaron sus armas y exigieron a la orrible criatura, y en un abrir de ojos, comenzó una nueva pelea, pero los cazadores tenían una fuerza sobre humana, hasta que uno de los 6 caballeros fue herido y mágicamente desapareció, dando un grito desgarrador, el príncipe tenia a dos en contra de él, logrando clavarle la espada a uno, dejándolo tumbado en el suelo, pero el otro que tenia encima estaba apunto de herirlo y cuando ya no tenia nada que hacer uno de sus caballeros lo cubrió, y fue herido en un hombro, y luego desapareció como el anterior, el príncipe se abalanzo sobre el cazador, mientras que veía como dos mas de sus hombres desaparecían, quedando solo Ruroni, el cual grito, Arles salta por ese barranco, yo te cubro, el príncipe tomo a la mogro y antes de saltar, vio como su amigo le atravesaba la espada a un cazador, pero luego uno lo sujetaba por la espalda mientras que el otro se abalanzaba sobre él, Arles cerro los ojos y salto, cubriendo a la mogro con su cuerpo, cayeron a un río, el que los arrastro varios kilómetros hasta que Arles agarrándose de unas ramas logro sacarlos a tierra y luego se desmayo.
Al despertar, estaba en una cueva e inmediatamente se acordó de sus compañeros y pensando en voz alta maldijo lo que les paso, pero la mogro escucho y largo a llorar, él se le acerco y le dijo que no se sintiera culpable, porque, lo que le querían hacer es imperdonable, usarlos como esclavos, y estaba seguro que sus hombres pensaban de igual forma que él, además ellos sabían que venir en esta misión seria peligroso, y lo hicieron por voluntad propia, contándole todo lo que pasaba en su reino y el porque estaban hay, hasta que la mogro se durmió, comprendiendo Arles que estaba agotada por haberlo cuidado toda la jornada.
Cuando ella se despertó, Arles le tenia comida y le dijo que él tenia que ir por la hierba, así que la dejaría en un lugar seguro, ella trato de decirle que quería ir con él, pero el príncipe no entendía, hasta que la mogro tomo una rama y escribió en el suelo, te quiero ayudar, impresionado el príncipe, le pregunto su nombre, pero ella le dijo que no recordaba nada, pero esos cazadores le decían para burlarse de ella, princesita, Arles la miro y le dijo que el la llamaría princesa también, pero porque pensaba que lo era de verdad, pero aun así, no podía llevarla con él, porque seria muy peligroso, ella respondió que no le importaba el peligro, porque quería hacer lo mismo que él izo por ella, además, no recordaba nada y no tenia donde ir.
Y así, Arles, encontró una nueva compañera para ir en busca de la hierba panaceimica, caminaron por dos días hacia los montes, hasta que esa noche, cuando estaban comiendo un conejo que él había cazado y en donde la conversación para ambos, se torno interesante y entretenida, el príncipe le promete a la mogro que después de salvar a su hermano, encontraría a su familia, ella le agradeció, luego le pregunto si a él lo esperaba una novia en el reino, a lo que este respondió que no, estoy solo ,pero lo que te voy a contar tal vez lo vas a encontrar ridículo, pero cada noche sueño con una mujer, ella es muy bella, tiene el pelo café claro, en el, lleva una flor en un costado, su piel es blanca con leves pecas en su rostro que le dan una hermosura que nunca había visto, siempre esta con un vestido blanco, sabes, el sueño es tan real, y si ella existiera te aseguro que estaría enamorado hasta mas no poder.
Cuando ya eran mas de las diez de la noche, un lobo negro casi moribundo, apareció de las sombras, gruñendo y alzándose sobre Arles, pero este sacó rápidamente su espada poniéndosela en el cuello, el lobo al verse atrapado, hablo, diciendo, no me mates, solo quería un poco de comida, impresionado el príncipe, solo atino a decir ¿puedes hablar? A lo que este respondió, ya estas en tierras mágicas, muy cerca de los llamados montes oscuros, donde todo a su alrededor se impregna de esa magia y todo puede pasar, luego el lobo le pregunto al príncipe si lo mataría, Arles, bajo su espada, tomo lo que quedaba del conejo y se lo dio al lobo notando que estaba herido, el animal agradeció, diciendo Halfar, esta en deuda contigo y además, ninguno de mi raza te hará daño ni a tí ni a los tuyos, luego desapareció entre los arbustos, el príncipe, volteándose donde estaba la mogro le dijo, creerás que soy un tonto al dejarlo ir, y además con la comida, pero ella le escribió que fue uno de los gestos mas nobles que había visto, luego sonrió escribiendo, en realidad no recuerdo nada, donde ambos rieron hasta que se quedaron dormidos.
Al día siguiente y después de un par de horas caminando de pronto apareció un ave gigante abalanzándose sobre la mogro, pero el príncipe, alcanzo a darle con su espada cayendo esta al suelo, pero, otra, de tras de la primera agarro a la mogro elevándose en dirección hacia los montes.
Arles, sabiendo que es lo que tenia que hacer, amarro al ave que estaba inconsciente, luego, curo sus heridas, pero pasaron dos días y a pesar de que ya estaba bien, aun no despertaba, hasta que de pronto abrió los ojos, y al verse amarrada, forcejeo con las cuerdas, pero aun que era tan grande, no pudo contra sus ataduras, luego el príncipe le dijo que se calmara, porque estuvo casi tres días inconsciente, además quería que lo llevara hacia los montes donde estaba la mogro y la hierba panaceimica, a lo que el ave le respondió, que nunca lo ayudaría, prefería morir antes de ayudar a alguien de su raza, el príncipe le dijo que aun así, la montaría, y el ave, respondió que si el la montaba, lo dejaría caer de lo mas alto, pero el príncipe sin hacer caso a las palabras del ave se subió en su lomo y con su espada corto la cuerda, y en dos segundos ya estaban a una altura inimaginable, el ave le dijo al príncipe que nunca había visto a un humano mas tonto y con eso, empezó a sacudirse, dar vueltas, pero el príncipe no se soltaba, a lo que el ave mas enojada, se movía y giraba con mas fuerza, pero nada daba resultado, y así estuvieron casi un día entero, agotada y humillada el ave bajo a tierra para descansar, Arles, agotado, pero fingiendo no estarlo, le dijo al pájaro, que él había ganado, que lo llevara a los montes, pero en un descuido de este, el ave se sacudió y arles salto al suelo, cuando el inmenso pájaro se disponía a volar el príncipe ya estaba afirmado en sus patas, el pájaro cansado de pelear, no despego, y le dijo, extranjero, te e traído a los montes, la mogro esta en un castillo a no mas de tres kilómetros de aquí, y sobre esa hierba que buscas, si aun llegara a quedar, también esta hay, aun así, te aconsejo que no vayas, o sino, no saldrás vivo, pero por otro lado, como sé que eres un humano obstinado e iras de todos modos , te advierto, ir allí, es mil veces mas peligroso que montar a un ave gigante, después el pájaro emprendió el vuelo.
Arles, sabiendo que en ese castillo, estaban las dos cosas que quería, salvar a la mogro y la hierba, no retrocedería, pero necesitaba un plan, así que antes de entrar, preparo una serie de distracciones, por si las cosas se complicaban, luego, entro por la puerta principal, y unos enormes felinos, lo rodearon, arles levanto los brazos y dijo, quiero hablar con su líder, fue llevado al salón principal, donde estaba un hombre muy elegante, Arles, asiendo un gesto se presento como Aramides, caballero del reino de Antillas, luego dijo, vengo en son de paz, mi ejercito esta afuera esperando, pero mientras yo no agá nada, ellos no les harán nada a ustedes, el hombre que estaba sentado, se paro de su silla, y le pregunto a Arles que era lo que andaba buscando, a lo que él respondió, hierba panaceimica, pero el hombre, le dijo que lo lamentaba, porque esa hierba crece una vez al año, y ya se había agotado, vera usted, soy un alquimista que llego a estos montes hace mas de doscientos años, después de diez años de estar aquí, en mis investigaciones, me di cuenta que esta hierba combinada con la alquimia, me hacia rejuvenecer por lo menos tres años, y además, me dio poderes que me hacen invencible, por lo tanto, le ruego que se retire, con su ejercito, antes de que me enoje, Arles, se quedo callado por unos minutos para hacer tiempo, luego dijo, no me iré sin la hierba, y levanto el brazo, y casi cien flechas atravesaron los ventanales del salón, luego Arles le dijo al alquimista, que eso, eran solo los arqueros, que habían casi doscientos hombres mas dispuestos a pelear, en lo que el alquimista rio y le dijo, cada año vienen ejércitos por la hierba, pero yo siempre gano y además termino destruyendo sus reinos y a su gente, solo por diversión, así que, tú decides.
Arles, mientras pensaba que iba a hacer, ya que su plan no había dado resultado, llegaron los dos cazadores sobrevivientes de aquella pelea donde desaparecieron todos sus hombres, y dijeron al alquimista, que era el mismo que escapo con la mogro, el alquimista asombrado, arranco mágicamente unos cabellos de Arles y los vacio en una fuente, donde vio todo respecto a él y le dijo, vienes de un reino del norte, as pasado diferentes adversidades, salieron seis hombres contigo, necesitas la hierba panaceimica porque a tu hermano lo mordió una vejeserpiente, luego perdiste a tus hombres y te hiciste muy amigo de la mogro, pusiste trampas para que pensáramos que tenias un ejercito e incluso ahora caerán cincuenta flechas mas al salón que serán las ultimas, y al decir esto, cayeron las flechas y el alquimista rio, se dirigió a Arles y le dijo, eres muy valiente, ahora entiendo porque ella se enamoro de ti, y en eso entro una mujer, custodiada por dos bestias, ella era la misma mujer de sus sueños, su pelo, sus pecas en su cara, la flor en su cabello y el vestido blanco, la mujer cuando vio a Arles le grito que tratara de escapar, pero era tarde, porque él estaba rodeado con por lo menos unas veinte bestias, en eso, el alquimista le dijo al príncipe, te explico, ella es la princesa kailin, y a pesar de que le pedí su mano a su padre, él se negó, diciendo que era ella quien erigiría a su pareja, pero, el quería que se casara con uno de los hijos de un amigo ya muerto, le ofrecí a ese viejo, riquezas que ni él como rey había visto y aun así, se negó, luego también trate de que ella me aceptara, pero me rechazo, aun que como siempre tengo lo que quiero, mande a que la raptaran, la transformaran en una mogro para pasar desapercibidos, y así cuando ella llegara, volverla a su forma original y darle una poción que aria que prácticamente se enamorara de mi, porque entenderás que no existe nada que agá que te enamores de alguien, pero se acerca lo suficiente, pero al darle la poción, ella, nuevamente, no sintió nada por mi, y eso significa que esta enamorada de algún hombre, pero eso, también tiene solución, la cual es matar a esa persona en frente de sus ojos y luego darle de beber nuevamente la poción, y ahora que ella esta mirando, maten al príncipe, con estas palabras las bestias se abalanzaron en contra de Arles, él saco su espada, trato de defenderse lo mas que pudo, pero eran muchos, y cuando estaban a punto de vencerlo, alguien, desde alguna parte, lanzaba flechas que le daban directamente en la cabeza a las bestias, tumbándolas, el príncipe sorprendido y agradecido, seguía peleando con mas fuerza, porque veía una esperanza, luego se acordó de las palabras del lobo, que le decía, que en tierras mágicas todo podía pasar y eso le dio aun mas coraje, pero el arquero dejo de disparar y seguían llegando bestias, Arles nuevamente estaba en peligro, hasta que escucho la voz del arquero, la cual era su amigo Ruroni, diciéndole venzamos a estas bestias.
Pelearon como nunca lo habían hecho, pero aun así ellos eran muchos, difícilmente podrían salir vivos, pero sorpresivamente unos treinta lobos y otros animales, entre ellos, Halfar, el cual era el líder, se alzaron sobre las bestias, y mordieron a Arles y Ruroni, aumentando sus fuerzas y velocidades, la pelea era terrible, hasta que el alquimista, decidió intervenir, derribando a cuanto lobo se le acercaba, hasta llegar donde Arles y Ruroni, los cuales combatieron cuerpo a cuerpo con él, de un lado a otro, hasta llegar a lo mas alto del castillo y en un descuido de Ruroni el alquimista le lanzo una magia que le atravesó una espada en el pecho, quedando agonizante en el suelo, ahora Arles era un blanco fácil, aunque este lucho con todo lo que pudo evadiendo hechizos y sus espadas, hasta que quedo en la orilla de la torre, ya no tenia donde escapar, el alquimista acorralando al príncipe le mando un hechizo que lo empujaba hacia atrás, cuando estaba a punto de caer, se atravesó la princesa kailin, cubriendo a Arles y diciéndole que lo amaba, ella, luego salió despedida al precipicio, Arles en un segundo de descuido, es atravesado en el hombro por uno de los brazos transformados en espada, del alquimista.
Hola, soy el autor de esta historia, si no te gustan los finales tristes no sigas leyendo esto.
El príncipe, sin ya tener nada que perder, tomo firmemente el brazo del alquimista y se lanzo al precipicio con él, ambos salieron desplegados hacia diferentes lados, pero nuestro villano, al silbar izo aparecer un pájaro gigante, que rápidamente poso a uno en su lomo dejando caer al otro, Arles, sintió que su cuerpo se azotaba en el suelo, luego abrió lentamente sus ojos y una luz semejante a la del sol lo encandilaba, sentía como si volaba y kailin lo miraba con esos hermosos ojos y le decía que lo amaba, el príncipe, aun aturdido, pensó que la muerte no era tan mala, miro a su alrededor y se dio cuenta que si volaba, en el lomo de la gran ave, ella lo había salvado y a kailin también, se le acercó, la miró, la tomó de la mano y le dijo que él siempre la a amado, como si se hubieran conocido en otro lugar, en un lugar mágico y luego se besaron, mientras el ave bajaba lentamente a tierra.
Ya en el suelo, él príncipe le agradeció al ave, pero esta, le agradeció al príncipe, diciendo que desde hace doscientos años su raza le servía a ese hombre, ahora son libres, gracias a ti y a esta jovencita que te izo pelear por ella, luego llegaron los lobos y animales que sobrevivieron a la gran batalla celebrando la victoria, Halfar se acerco al príncipe y le dijo, que ya le había pagado el favor, pero otra vez, estaba en deuda con él, porque hace años que estaban tratando de vencer al alquimista y gracias a su valentía o estupidez lo lograron y además, que no se preocupara por esa herida en su hombro, porque, ahora corría sangre de lobo en sus venas, y en un par de días sanaría, en eso apareció Ruroni tambaleando y dijo, por la mía también. Cuando todos estaban contentos, porque, por fin se había acabado esa guerra, Arles interrumpió el festejo, diciendo, debo volver donde mi hermano, para pedirle perdón por haber fallado, luego, el príncipe le pidió al ave si los podía llevar de vuelta, el ave accedió, diciendo seria un honor y cuando estaban a punto de partir, el príncipe, la princesa y Ruroni, Arles se cayo al suelo, Halfar al oler la herida del príncipe, dijo que la herida esta envenenada, pero Arles pidió que lo subieran al ave, Ruroni le indicaría el camino, y tal vez el doctor sabría que hacer, pero Arles sabia en el fondo que siendo un veneno del alquimista seria muy difícil.
Así emprendieron el vuelo, kailin cuido de arles, el cual cada vez se agravaba más, hasta que llegaron a las puertas del castillo, el guardia al ver un ave gigante se asusto, pero luego al reconocer a Ruroni y ver al príncipe enfermo, toco con todas sus fuerzas las trompetas, llevando al príncipe con su hermano y su madre.
Edgard ya parecía un anciano de 90 años, solo las ganas de despedirse de Arles lo mantenía vivo, cuando él entro, le pidió perdón por haber fallado, pero su hermano le dijo que lo quería y le daba las gracias por haber arriesgado su vida, en eso entraron Joseph y el doctor, al revisar a Arles dijo que el veneno estaba muy avanzado, kailin largo a llorar, el doctor la miro y al verle la extraña flor que llevaba en su pelo, dijo, es la flor de la hierba panaceimica y sacándola del pelo de kailin, la llevo a su laboratorio, pero la princesa se volvió a convertir en la mogro, los que estaban alrededor se asustaron, pero Arles les dijo que no tuvieran miedo, porque era la mujer que amaba, luego el doctor, volvió con una pócima y le dio de beber a Edgard, luego a Arles, los cuales empezaron a sanar rápidamente, pero solo quedaba poción para una sola persona, kailin, pidió que se la dieran a la reina, y así se izo.
Paso un año, Arles y Kailin vivieron felices, a pesar de la forma de ella, los dos reinos se juntaron, el padre de ella estaba feliz porque por esas coincidencias de la vida, le había cumplido una promesa a un amigo.
El príncipe con la princesa, volvieron a los montes, hoy llamados montes mágicos, ella volvió a ser como era permanentemente y siguieron siendo tan felices como ya habían sido.
Soy el autor, sabía que si no te gustaban los finales tristes igual seguirías leyendo.
Y hasta aquí cuento esta historia...
Fin.
